Este es un mes de fuertes lluvias en la Mesa Central y, sin embargo, estas precipitaciones causan cielos despejados y limpios de contaminación, por lo que muchas noches son ideales para observar el cielo.
En el Hemisferio Norte tenemos, a las 20 horas, Vega, la estrella principal de la constelación Lira, sobre nuestras cabezas, ligeramente hacia el norte; un poco al oeste de Vega se halla la constelación Hércules que en el lado oeste de su cuadrilátero central, alberga uno de los cúmulos globulares más bellos del cielo, visible a simple vista. Con apoyo de binoculares o con un pequeño telescopio se puede apreciar su gran belleza. Mucho más al este, llegan a verse el gran cuadrilátero de la constelación Pegasus y la constelación Andrómeda donde se halla la gran Galaxia de Andrómeda, igualmente visible a simple vista.