El premio Nobel de Física 2006 fue compartido por dos cosmólogos prácticos de primer nivel. Los estadounidenses George Smoot y John C. Mather fueron laureados por realizar lo que Stephen Hawking llamó el descubrimiento científico del siglo (XX), si no es que de todos los tiempos.

Muchos de los secretos de la creación del Universo quedaron aclarados cuando ellos detectaron las características y la distribución de la radiación de fondo del cosmos y la forma en que ésta varía en intensidad y llega a nosotros desde cada dirección de la esfera celeste. Para ello, utilizaron desde globos aerostáticos lanzados en el polo sur, hasta aviones espías U2 y el famoso satélite COBE, que mide las emisiones del fondo cósmico, actuando éste como un cuerpo negro radiante.