A principios de junio, en el hemisferio norte, al anochecer y en el este, podemos observar el famoso triángulo de estrellas de primera magnitud Vega-Altair-Deneb, principales de las constelaciones Lyra (la Lira), Aquila (el Águila) y Cygnus (el Cisne); las dos últimas situadas en plena Vía Láctea.
Sobre nuestras cabezas se halla Acturus, principal estrella de la constelación Bootes (el Boyero) y más al sur tenemos a Spica, principal de la constelación Virgo (la Virgen). Al oeste se halla Régulus, de la constelación Leo (el León) con Saturno al lado, todavía muy brillante.
En el hemisferio sur, a mediados del mes, muy al sur sobre el horizonte, podemos observar las famosa Cruz del Sur, y al este de ella está la constelación Centaurus (el Centauro) que posee uno de los más bellos cúmulos globulares del cielo, llamado Omega. Más al este, se levanta la constelación Scorpius (el Alacrán) con Antares, su estrella principal, gigante roja ¡cuyo diámetro rebasa el de la órbita de Venus...!